Dylan era un niño al que una bala en el cráneo le había arrebatado la oportunidad de jugar. Después de mucho tocar puertas, con ayuda de Fundación MAC y un grupo de empresarios, él tuvo una cirugía reconstructiva, con lo que pudo volver a salir con su pelota.
A esto, Ana Gabriela Gómez, Directora Ejecutiva de Fundación MAC le llama suma de voluntades. Consideró que el trabajo en conjunto es indispensable para encontrar soluciones a las múltiples necesidades de salud en México y la demanda de cirugías entre los grupos más vulnerables.
Desde su inicio, hace más de 10 años, Fundación Hospitales MAC ayuda a personas de bajos recursos, tanto adultos como niños con operaciones gratuitas.
Éstas pueden ser cardiovasculares pediátricas, renales, de labio leporino, oculares, entre otros.
La entrevistada informó que en esta década, se han realizado intervenciones para atender esclerosis múltiple; cardiopatías congénitas, una anormalidad en el corazón que se desarrolla antes del nacimiento; trasplantes de riñón; labio y paladar hendido; y de cataratas, por mencionar algunas.
"Todos (los procedimientos) van surgiendo con una misma mentalidad, que son problemas de salud importantes en nuestro país que hay que combatir, que hasta cierto punto hay rezago. Hay muchos pacientes que requieren estas cirugías y no hay suficientes personas o suficientes instituciones que puedan ofrecer las cirugías o al costo que ellos necesitan", señaló.
Así, dijo, surgen estos programas que buscan atender estas problemáticas de manera integral, lo que insistió, se puede atender en conjunto.
"Hay muchos jugadores dentro de esa industria, desde médicos y las familias, instituciones públicas, entonces lo que queremos crear es un ecosistema con todos y aparte empezarlo a regionalizar para que estos niños que anteriormente se tenían que ir a atender a la Ciudad de México o a las ciudades grandes, se puedan estar atendiendo de manera local", indicó.
"Que todo lo que hagamos sea parte de un impacto positivo, un impacto transformativo que realmente haga un cambio transformacional en cómo se combaten estas problemáticas de salud y que además ese cambio sea trascendente. ¿Cómo vamos a lograr eso?, la primera, es fortaleciendo nuestros programas a través de alianzas con otras fundaciones con el sector público, con los médicos y los colegios de médicos, con otras asociaciones y esta parte de sumar voluntades.
"Porque al final del día, el hospital, el procedimiento, es sólo un eslabón en la cadena y sí, es un eslabón muy importante, pero al final del día, solamente es un eslabón. Entonces, necesitamos sumar las voluntades de todos estos actores para que realmente nuestros proyectos tengan el impacto que queremos y que nuestros programas puedan ser replicables y escalables", agregó.
Ana Gabriela Gómez precisó que los pacientes electos para estas cirugías gratuitas deben forzosamente vivir en una situación vulnerable, lo que se determina mediante protocolos propios que consisten en estudios socioeconómicos, entrevistas con las familias, y a veces, la visita de una trabajadora social.
Y posteriormente, un médico emite un dictamen para valorar la viabilidad de la cirugía, o si desde el punto de vista clínico, el paciente puede ser candidato a alguno de los programas de la fundación, para incrementar la probabilidad de resultados positivos.
