La pandemia ha traído consigo innovación en el área farmacológica con el desarrollo de vacunas y tratamientos; sin embargo, el mercado de dispositivos médicos ha innovado de manera continua, incluso antes de la crisis.
Los dispositivos médicos forman parte de la infraestructura para la atención de los pacientes, pues ayudan en el diagnóstico y tratamiento, por lo que son herramientas necesarias para cualquier sistema hospitalario.
Sergio Domínguez, vicepresidente de Capacitación de Dispositivos Médicos en CANIFARMA y director de Atención Cardiovascular y Radiología Intervencionista en América Latina en Siemens Healthineers, explicó en entrevista con Conexiones365 que México es uno de los pioneros en el desarrollo de dispositivos médicos.
“Hoy somos el octavo exportador de dispositivos a nivel mundial”, recordó y agregó que no solamente se manufacturan para complementar otros, sino que en el mismo país se terminan y se exportan.
“México es un país muy relevante en la generación de estos elementos, y seguramente lo va a seguir siendo en el futuro, puesto que existen muchas organizaciones que están colaborando con el gobierno para que haya una mayor inversión”, afirmó. También indicó que se busca que la población mexicana tenga mayor acceso a aquellos dispositivos que se desarrollan en el territorio.
Por otro lado, Domínguez señaló que los dispositivos médicos se clasifican en seis puntos, de acuerdo con la NOM-241-SSA1-2012: los que son destinados para diagnóstico (exploración, tratamiento); el área de prótesis; los agentes de diagnóstico, aquellos que se ocupan para, por ejemplo, biometría hemática, reactivos, cultivos; insumos de origen odontológico, que tiene su propia clasificación; materiales quirúrgicos y de curación; y los productos higiénicos, como los bloqueadores solares.
Hay más de 10,000 dispositivos distintos en todo el mundo y se busca que lleguen a cada uno de los rincones para que sean utilizados de una manera participativa, preventiva, personalizada y predictiva.
IA, wearables, robótica e híbridos
Sobre las innovaciones que se han ido impulsando y estudiando incluso antes de la pandemia, Domínguez mencionó que una de las principales tendencias es la fusión entre farma y dispositivos médicos y así tener algunos híbridos.
Entre los desarrollos se encuentran dosificadores de medicina (encapsulados), que liberan los fármacos ingeridos. “Ya teníamos ciertos temas avanzados, como por ejemplo, la colocación de stents con la liberación de droga, que es prácticamente la liberación para evitar que se formen coágulos en las coronarias, posteriores a la colocación del implante”, afirmó el vicepresidente de Capacitación de Dispositivos Médicos en CANIFARMA.
Asimismo, ya se estaba hablando de biopsias líquidas y de agentes de diagnóstico especializado mucho más rápidos, como la detección genética —antes solía ser bastante costoso el estudio de genoma especializado, ahora se puede obtener este tipo de diagnósticos a precios más accesibles para ver las tendencias que tiene el paciente para ciertas enfermedades—.
Por otra parte, han tenido un gran impulso las tecnologías de dispositivos implantables, como lo que son los wearables, que no solamente dan horas o dan acceso a varias aplicaciones, también se han utilizado en investigaciones para el control y seguimiento de pacientes con problemas cardíacos.
“Han ido avanzando esos dispositivos para poder ver pulso, el electrocardiograma, y poder tener información prácticamente 24 horas durante un tiempo prolongado”, afirmó Domínguez y contrastó que en el pasado se tenían que utilizar dispositivos especializados durante 24 horas y no se sabía si podías tener o no una arritmia durante ese momento.
Aunado a lo anterior, la inteligencia artificial (IA) y la robótica están creciendo de manera sustancial, estamos hablando de que prácticamente el 70% de los robots en el campo médico están enfocados en el área quirúrgica y de intervención. Estas tecnologías se utilizan para asistencia en trasplantes específicos o para poder realizar tratamientos oncológicos muy especializados, es decir, son usados para tipos de cáncer difíciles de alcanzar.
En cuanto a IA, se está utilizando para el diagnóstico acelerado, pues gracias a esta innovación, se le puede enseñar a la máquina exactamente qué tipo de problemas se pueden observar en una imagen diagnóstica, lo que acelera el diagnóstico y minimiza los errores.
Incluso cuando hay una gran cantidad de diagnósticos acelerados, eso no significa que sustituirán al personal médico. Empero, son herramientas de gran utilidad que permiten acelerar los diagnósticos y tener más precisión.
Tomógrafos móviles y diagnóstico por imagen
Los equipos médicos han avanzado con innovaciones como los tomógrafos móviles, que se colocan dentro de algunas ambulancias para poder diagnosticar derrames cerebrales, lo que resulta benéfico para el paciente, pues los accidentes cerebrovasculares son la segunda causa de problemas o deshabilitación laboral de las personas, ya que el paciente puede llegar a tener una pérdida completa de funciones.
“Cada segundo que no se atiende al paciente conlleva pérdidas funcionales, inclusive puede llegar a un estado vegetativo, el cual puede resultar en una asistencia mecánica permanente”, ahonda Domínguez y añade que gracias a estas herramientas se puede diagnosticar a tiempo.
Actualmente, se están desarrollando dispositivos pequeños y grandes para el diagnóstico por imagen. Hay equipos como la resonancia magnética con tomografía con emisión de positrones (TEP) que detectan algunos marcadores cancerígenos. Al tener el conjunto de la resonancia con la tomografía se obtiene información muy detallada.
“Gracias a la simbiosis de estos dos mundos, está creciendo mucho en el diagnóstico, porque la resonancia es muy buena para detección de ciertos isquemias o ciertos problemas cardíacos, y, por supuesto, cuando estamos hablando de temas oncológicos, el mejor elemento que podemos encontrar para este tipo de diagnósticos es el TEP”, indicó el especialista.
Para el experto, el mercado de dispositivos médicos seguirá creciendo de manera significativa con desarrollos como órganos biónicos, que ayudarán a evitar la espera por un órgano compatible; e innovaciones como las inyecciones sin aguja —que sí la tienen, pero resulta imperceptible— y la impresión en 3D de prótesis de manos, donde se busca obtener materiales con mayor biocompatibilidad —más flexibles, fuertes y durables—.
Avanzan, incluso en la pandemia
De acuerdo con Domínguez, no se atrasaron las innovaciones, sino que se observó que la misma crisis impulsó la creación de ideas para acelerar el desarrollo de dispositivos médicos. Además, se dio un mayor enfoque en el uso de estas herramientas, sobre todo para tratar COVID.
Sin embargo, el experto detalló que en México sí tuvimos una reducción de cerca del 30% de dispositivos médicos que no impactan a COVID, en cuanto a la utilización y la comercialización. Además, hay áreas que no se detienen. Los tratamientos cerebrovasculares son procedimientos que siguen teniendo incremento en el número de casos. Debido a COVID-19, estos accidentes se incrementaron cerca del 10%.
“Se espera que vaya a haber una necesidad crucial de diferentes tratamientos por no haberlos atendido [los padecimientos] de manera óptima, el cáncer sobre todo. Hay muchos hospitales que tuvieron que dejar de tratar a los pacientes, porque el problema de COVID fue importante”, puntualizó Domínguez.