En este siglo XXI, la salud evoluciona de la mano de la tecnología. La industria mobiliaria lo sabe, por lo que realiza modificaciones en el diseño, con adiciones de herramientas digitales que atiendan a las nuevas necesidades.
En los muebles dirigidos a la Telemedicina, los elementos necesarios son un monitor y una cámara de video para ser “los ojos” del personal de salud o paciente que se encuentra vía remota. Asimismo, el micrófono funge como “la boca”.
Estos aparatos, son básicos para mantener el vínculo con personas, estudiantes, colegas o pacientes del otro lado de la pantalla, en los diagnósticos y teleconferencias realizados a distancia.
A algunas comunidades, a través de la tecnología en salud o salud digital, se han llevado aparatos para que especialistas tengan interacción con pacientes u orienten a médicos que ejercen en zonas lejanas.
Imaginemos que un doctor en la sierra mixteca quiere mostrarle a un dermatólogo de la Ciudad de México, una lesión sospechosa en el tobillo de un paciente que no sanó con el tratamiento convencional. Seguramente, el experto querrá observar lo más cerca posible y con la mejor definición.
La ergonomía, como la disciplina encargada de la adaptación de las máquinas, muebles y utensilios, hace su entrada estelar con la popularidad actual de la telemedicina (1).
En el mercado, empresas como Ergotron, ofertan muebles equipados con sistemas combinados o deslizables para la telepresencia. Ofrecen facilidades para el movimiento panorámico y evitan incomodidades, tanto para el paciente, como para quien manipule el aparato (2).
Algunos de éstos, incluso tienen más de dos monitores para ampliar la visión del espacio y destacan por lograr funcionamiento por horas prolongadas, gracias a su tipo de batería.
Su sistema de alimentación emplea tecnología de baterías de fosfato de litio-hierro, que admite aproximadamente el doble de ciclos que las baterías de litio-hierro y hasta seis veces más ciclos que las baterías de ácido-plomo selladas (SLA) (3).
Otras compañías como Promotal, resaltan la importancia de muebles o carros de teleconsulta, diseñados específicamente para mover el equipo a través de una habitación, o incluso de una a otra (4).
También destaca la importancia de contar con una buena conexión a internet. Promotal refiere que el software de teleconsulta, tiene la capacidad para tener casi cincuenta dispositivos conectados, como el monitor de presión arterial, estetoscopio, otoscopio, monitor de signos vitales, colposcopio, oxímetro, espirómetro, sonda doppler, entre otros.
En junio del año 2020, el Gobierno de México emitió el documento “Unidad de contacto para interconsulta a distancia (UCID). Atención a enfermedades crónicas.”
Éste se enfoca en telesalud y uno de los puntos enlistados, es contar con la infraestructura y tecnología para ello. Así como contar con personal de salud que brinde el servicio a distancia en buenas condiciones laborales.
También toca la importancia de que los profesionales de salud utilicen y tengan acceso a muebles ergonómicos y cuenten con buenas instalaciones seguras e higiénicas, lo que en conjunto tiene el propósito de preservar la salud (5).