El gobierno de AMLO argumentó que el desabasto de medicamentos fue por la corrupción existente en el sector.
En marzo de 2019 comenzó el problema de desabasto de medicamentos en los sistemas de salud en el país y, aunque ya llegamos concluyó ese ciclo, el problema no se ha solucionado.
Si bien el desabasto ya existía en el gobierno de Enrique Peña Nieto, el problema se agudizó con la llegada de la nueva administración, encabezada por Andrés Manuel López Obrador: se cancelaron las licitaciones que ya se habían realizado, se modificaron los procesos de licitación y se vetaron al menos a tres distribuidoras de medicamentos, acusadas de lucrar con la salud de los mexicanos.
Los pacientes afectados comenzaron a manifestarse ante la falta de medicamentos para enfermedades graves, como el cáncer. Una decena de padres de familia se instaló afuera del Palacio Nacional y de los hospitales para exigir metotrexato para sus hijos.
En Veracruz y en Nuevo León se abrieron investigaciones para revisar las denuncias de los padres, quienes aseguraban que algunos niños murieron por falta de medicamentos. En tanto, los trabajadores de salud de Baja California pararon labores porque no contaban con los medicamentos para atender a los empleados enfermos de diabetes, falla renal y cáncer.
Solo después de las movilizaciones, López Obrador admitió que había desabasto de medicamentos y se justificó bajo el argumento de que su gobierno está luchando contra la corrupción que hay en el sector.
El problema de desvío de recursos ha sido persistente a lo largo de los años, de acuerdo con los resultados de la fiscalización que hace la Auditoría Superior de la Federación cada año.
En 2018, la dependencia encontró que los gobiernos de las 32 entidades no han podido comprobar 4,853 millones de pesos (mdp) etiquetados para temas de salud.
Ante estos datos, el gobierno enfatizó su argumento de la lucha contra la corrupción y centralizó los procesos de compra. Sin embargo, los resultados no fueron alentadores y 62? las 3,000 claves se declararon desiertas en la primera licitación, realizada el 30 de junio. A lo largo del año se han realizado más licitaciones, sin que el problema se solucione.
En octubre pasado, un grupo de organizaciones no gubernamentales presentó la iniciativa No al huachicol de medicinas, que se construyó a partir de denuncias ciudadanas.
Los resultados revelaron que los pacientes con diabetes, hipertensión, cáncer, VIH, falla renal, ansiedad, convulsiones y artritis reumatoide son los más afectados por la falta de fármacos. Y los estados con mayores problemas con la Ciudad de México, el Estado de México, Veracruz y Chihuahua.
La iniciativa continúa recolectando las denuncias de los pacientes, mientras el gobierno asegura que está garantizado el abasto de medicamentos para 2020, e incluso se liberarán más recursos económicos a los estados que así lo requieran.
