Encontrar tecnología que cumpla tanto con los estándares de sostenibilidad como con los de seguridad en operaciones que manejan datos sensibles suele percibirse como un desafío complejo dentro del sector salud; sin embargo, esta combinación clave ha estado presente desde hace más de dos décadas.
En un contexto donde los sistemas de salud enfrentan constantes amenazas cibernéticas, como software espía que evade métodos de detección tradicionales, los riesgos son mayores en entornos hospitalarios. Incluso acciones aparentemente inofensivas, como abrir un video o visitar un sitio web, pueden infectar dispositivos y sistemas conectados. Estas brechas comprometen datos sensibles, exponiendo a los pacientes al riesgo de chantaje y generando costos significativos por multas y pérdida de eficiencia operativa.
La buena noticia es que existen estrategias innovadoras para mitigar estos problemas, y la tecnología sustentable puede convertirse en un aliado en la protección contra ciberataques.
Tecnología sustentable como pilar en el sector salud
Al igual que en otras industrias, los esfuerzos por lograr "cero emisiones de carbono" han tomado protagonismo en la atención médica. Países como el Reino Unido buscan liderar esta tendencia con el objetivo de tener un servicio de salud nacional (NHS) completamente neutral en carbono. Actualmente, el 18% de las emisiones del NHS provienen de dispositivos médicos. Esto impulsa a las instituciones de salud a implementar soluciones tecnológicas sustentables para reducir su impacto ambiental.
Pequeños cambios en el diseño y uso de dispositivos como computadoras, tabletas, escáneres de códigos de barras y lectores RFID pueden tener un impacto significativo. Al entender cómo estas herramientas afectan las emisiones de carbono, los proveedores de salud pueden tomar decisiones informadas para avanzar hacia sus objetivos de sustentabilidad.
Seguridad y sustentabilidad: un binomio estratégico
Se piensa que las organizaciones deben elegir entre seguridad o sustentabilidad, debido a la diferencia en los ciclos de vida de software y hardware en dispositivos móviles. Sin embargo, ya existen dispositivos diseñados para garantizar ambas características.
Por ejemplo, dispositivos clínicos y portátiles, como tabletas y wearables resistentes, pueden tener una vida útil de cinco a siete años o más, en comparación con los ciclos de dos años típicos de los dispositivos de consumo. Esto reduce la huella ambiental derivada de la manufactura y minimiza los componentes no reciclables en los vertederos.
Además, tecnologías como el monitoreo remoto de dispositivos permiten a los equipos de TI automatizar actualizaciones de seguridad mensuales, reducir el desgaste de los dispositivos y extender su operatividad. Esto no solo disminuye la presión sobre las líneas de producción, sino que también reduce la cantidad de residuos electrónicos.
Inteligencia para prevenir ciberataques
Un enfoque proactivo es esencial para identificar y prevenir ataques sutiles que comprometan dispositivos. Cambios en patrones de uso de memoria o batería pueden indicar actividad sospechosa, lo que hace que las capacidades de monitoreo y detección sean fundamentales.
Herramientas avanzadas, que recogen datos de dispositivos y aplicaciones a través de agentes instalados, ofrecen visibilidad sobre actividades inusuales. Estas herramientas, mediante tableros intuitivos, ayudan a los hospitales a reaccionar rápidamente ante comportamientos inesperados y mejorar la eficiencia operativa.
Un ejemplo de esta tecnología es el software de monitoreo basado en machine learning, que puede analizar más de 250 puntos de datos relacionados con la salud y uso de dispositivos para predecir problemas potenciales. Esta tecnología permite proteger los dispositivos y al mismo tiempo alcanzar metas de sustentabilidad.
Beneficios financieros y operativos
La convergencia de sustentabilidad y seguridad no solo tiene beneficios ambientales y operativos, sino también financieros. Los dispositivos diseñados para durar más tiempo reducen costos de adquisición y reciclaje. Las actualizaciones automáticas de seguridad protegen los datos y evitan penalizaciones por brechas de seguridad.
Además, las instituciones pueden evitar daños a su reputación, tanto por ciberataques como por prácticas poco sustentables como el reemplazo constante de dispositivos. Esto genera confianza entre los pacientes, refuerza el compromiso institucional con la sostenibilidad y fortalece la posición de los hospitales en un mercado cada vez más exigente.
Asegurando un futuro sustentable y seguro
Al alinear decisiones tecnológicas con objetivos de sostenibilidad y protocolos de seguridad, los hospitales pueden marcar una diferencia significativa en su impacto ambiental y su protección ante ciberamenazas. Esta estrategia no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también garantiza un entorno más seguro y responsable para los pacientes y el personal médico.
La adopción de tecnología sustentable y segura es, sin duda, un camino hacia un futuro más limpio y eficiente en el sector salud.
Retomado de:
Omnia Health by Informa Markets